Somos un montón. Nos cruzamos en los baños de las dependencias públicas, las consultoras falopas, las redacciones falopas, las ONGs falopas, las facultades falopas, los institutos falopas y las fiestas falopas. Siempre hay un charco de agua en el piso de ese baño y siempre nos decimos "guarda que hay agua". Tenemos una alternativa delirante para cada problema reventado.

martes, 6 de noviembre de 2012


¡Oh con mi amado al rosedal en un sábado soleado!
¡De agosto! Las chicas se visten como lady gaga
se pintan de fucsia las puntas del pelo y se maquillan
con mucho rimmel y rubor para patinar.
Tienen amigos varones que se visten como lady gaga.
Verlos en sus rollers es ¡una boludez! La guardia urbana pasa
a las 7 con silbatos y dos gordas de amarillo dicen:
“¡El parque está cerra-doooo!
¡Diríjanse a la Sali-daaaaa!”
También están las que andan en rollers para ser normales.
Yo quisiera tener patines o una bici o zapatillas
aunque sea. Si las tuviera, sería una persona
capaz de tomar decisiones metodológicas: elegir casos
elegir variables elegir entrevistas elegir cuestionarios
y avanzar con la tesis. La de maestría aunque sea.
Pero tengo botitas con suela de madera y esta remera
negra con encaje con olor a cigarrillo.
Esta campera de origen animal 
que me salió 1500 pesos
no sirve para disfrutar del aire libre.
En el auto le digo a mi amado que tiene que tomar una decisión
sobre qué quiere quiénes somos
hacia dónde pretende que vayamos
con este sentimiento que me profesa.
Pero él es alguien que pierde sus tarjetas
deja las llaves adentro de la casa y cierra la puerta
conserva vínculos con sus ex novias a lo largo del globo
para que lo salven de su desidia y sus accidentes
y cada dos o tres días vuelve a creer en mí. 

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